Esto era un gigante, que se habia cansado de serlo y tomo la sábia decision de ir a ver a una bruja.
-¿Que es lo que puedo hacer para encogerme? Le preguntó él.
- Solo necesitas beberte esta poción, pero eso si, con una condición. Le dijo ella.
-Y cual es?
-Debes prometerme tu lealtad.
Él asintio, y la bruja, viendo que el gigante se hacia cargo de su parte del trato, le proporcionó la pócima.
Al instante de beberla, encojió bruscamente y quedo de un tamaño común.
Él, sumamente agradecido no tan solo le ofreció su lealtad sino también sus servicios.
miércoles, 28 de noviembre de 2007
MICROCUENTO
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1 comentario:
Bien, aunque no confundas cuento popular con microcuento. Deberías revisarlo ortográficamente.
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